En un contexto marcado por la existencia de múltiples crisis globales y conectadas, Foro UNIR debatió sobre cómo adaptar los proyectos a la realidad actual para lograr financiación. América Latina enfrenta desafíos y oportunidades en sectores como la economía verde y la digitalización.

Los 7 puntos claves del Foro UNIR
- Policrisis global: El mundo atraviesa una superposición de crisis que está transformando el orden internacional y afectando la lógica de la cooperación.
- Cooperación transaccional: Los intereses del donante son ahora tan relevantes como los del receptor, lo que obliga a replantear los proyectos.
- Industrialización verde: Sectores como la energía renovable y la economía digital concentran la financiación internacional.
- Minerales críticos: América Latina posee recursos estratégicos, pero corre el riesgo de quedar relegada a un rol extractivo.
- Acceso directo para ONG: Las organizaciones no gubernamentales pueden acceder a fondos sin intermediación estatal, aunque con limitaciones según el tipo de proyecto.
- Cocreación y sostenibilidad: Los financiadores exigen proyectos construidos con las comunidades y con impacto duradero.
- Formación especializada: La profesionalización del sector es esencial para acceder a fondos y ejecutar proyectos con éxito.
La Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) celebró el foro online ‘Claves para obtener fondos de cooperación internacional al desarrollo’ con más de 4.000 inscritos, principalmente de Colombia y Perú. El evento abordó los desafíos actuales para captar financiación internacional en un contexto marcado por la transformación geopolítica, la industrialización verde y la redefinición de prioridades por parte de los países donantes.
Participaron Fernando de la Cruz Prego, doctor en Estudios de Desarrollo y profesor en UNIR; Rodrigo Ormazábal Lama, responsable del Departamento de Cooperación Internacional de la Fundación Tierra de Hombres; y Gemma Lorente Martín, coordinadora técnica del Máster en Cooperación Internacional al Desarrollo de UNIR. Moderó el encuentro Jorge Heili, periodista y director de Foro UNIR.
De la cooperación al interés estratégico
La intervención inicial de Fernando de la Cruz Prego trazó un panorama global marcado por lo que denominó una “policrisis”: una superposición de crisis económicas, sociales, políticas y tecnológicas que se retroalimentan y aceleran sus efectos. Este fenómeno, explicó, está erosionando el orden internacional establecido tras la Guerra Fría, caracterizado por la hegemonía estadounidense, el multilateralismo y la globalización.
“El viejo orden no termina de desaparecer y el nuevo no acaba de consolidarse”, señaló De la Cruz, describiendo el momento actual como una fase de interregno. En este contexto, la cooperación internacional ha dejado de ser exclusivamente desarrollista para convertirse en transaccional, donde los intereses del donante pesan tanto —o más— que los del receptor.
La industrialización verde y la economía digital emergen como sectores prioritarios en esta nueva lógica. La competencia global por liderar la Cuarta Revolución Industrial ha disparado la demanda de minerales críticos como el litio, el cobre y las tierras raras, muchos de ellos abundantes en América Latina. “La transición energética y digital es intensiva en minerales, y eso está reconfigurando la cooperación internacional”, advirtió.
Jorge Heili y Fernando de la Cruz en un momento del evento.
Oportunidades y riesgos en América Latina
Foro UNIR puso especial énfasis en el papel de América Latina en este nuevo escenario. Aunque la región posee recursos estratégicos, como los minerales necesarios para la transición verde, corre el riesgo de quedar relegada a un rol de proveedor de materias primas, sin beneficiarse plenamente del proceso de industrialización.
“Una vez más, América Latina parece estar perdiendo el tren de la industrialización”, lamentó De la Cruz. Mientras Asia lidera la transformación, la región aparece en gris en los mapas de enclaves manufactureros verdes. La falta de una estrategia clara por parte de los gobiernos latinoamericanos podría derivar en nuevas formas de dependencia y lógicas neocoloniales.
En este sentido, el experto subrayó la necesidad de que los países latinoamericanos adopten posiciones firmes en la negociación con los donantes. “Los gobiernos deben tener muy claro qué quieren y cómo esta financiación puede beneficiar realmente a su ciudadanía”, subrayó.
¿Es posible prescindir de los gobiernos?
Uno de los temas más debatidos en el foro fue la posibilidad de que organizaciones no gubernamentales accedan directamente a fondos internacionales, sin pasar por los gobiernos nacionales. De la Cruz explicó que muchas agencias bilaterales o también, por ejemplo, la Comisión Europea, ofrecen convocatorias específicas para ONG, sin intermediaciones estatales.
Sin embargo, matizó que esto aplica principalmente a proyectos de menor escala. “Cuando hablamos de industrialización verde, hablamos de grandes infraestructuras que requieren grandes financiaciones. Y esas solo las pueden asumir gobiernos o grandes empresas”, aclaró.
La nueva forma de solicitar fondos
Rodrigo Ormazábal Lama aportó una visión práctica desde su experiencia en la Fundación Tierra de Hombres. En su intervención, destacó tres elementos claves que han transformado la forma de solicitar fondos: la cocreación, la sostenibilidad y el impacto.
“Ya no basta con presentar un proyecto desde la necesidad local. Hay que demostrar que ha sido cocreado con la comunidad y que responde también a los intereses del donante”, explicó. Esta lógica obliga a las organizaciones a profesionalizarse, mejorar sus capacidades técnicas y establecer alianzas estratégicas.
Ormazábal también ofreció recomendaciones concretas para organizaciones pequeñas que buscan acceder a fondos. “Lo primero es tener claro qué puedes ofrecer en una alianza. Luego, identificar qué financiadores están activos en tu territorio y buscar consorcios con organizaciones más grandes”, aconsejó.
Formación y capacidades como factores esenciales
Desde el ámbito académico, Gemma Lorente Martín subrayó la importancia de fortalecer tanto las habilidades técnicas como las blandas en los profesionales que trabajan en cooperación. “Hay que conocer los escenarios geopolíticos, saber gestionar proyectos y desarrollar capacidades como la empatía y la adaptación al cambio”, señaló.
Lorente destacó que la Maestría en Cooperación Internacional al Desarrollo de UNIR está diseñada precisamente para responder a estas necesidades. “Nuestros alumnos vienen de áreas muy diversas: derecho, ingeniería, educación, cultura… La maestría les da las herramientas para aplicar sus conocimientos al ámbito de la cooperación”, explicó.
Además, resaltó el valor del networking y la conexión con profesores en activo en este sector, lo que permite a los estudiantes tener una visión realista y actualizada de los desafíos que enfrentan las organizaciones.
Nuevas estrategias para nuevos tiempos
El evento concluyó con una reflexión sobre la necesidad de adaptar las estrategias de captación de fondos a la nueva realidad. “La cooperación internacional ya no es lo que era. Hoy hay que entender los intereses del donante, construir relaciones de confianza y presentar propuestas técnicamente sólidas”, resumió Ormazábal.
De la Cruz insistió en que, aunque el modelo transaccional plantea desafíos, también abre oportunidades para quienes sepan adaptarse. “Cada organización debe encontrar su punto de equilibrio entre sus objetivos y los del donante. La flexibilidad será fundamental para acceder a la financiación”, concluyó.
Lorente Martín, por su parte, animó a los profesionales a formarse y especializarse. “La cooperación se trabaja desde muchos ámbitos. Con una buena base técnica y una visión global, se puede contribuir al desarrollo desde cualquier disciplina”, destacó.
Los mensajes principales de los expertos
Fernando de la Cruz Prego:
- “La cooperación internacional está cambiando hacia un modelo transaccional donde los intereses del donante son prioritarios”.
- “América Latina corre el riesgo de quedar fuera de la industrialización verde si no define una estrategia clara”.
Rodrigo Ormazábal Lama:
- “La cocreación, la sostenibilidad y el impacto son ahora requisitos fundamentales para acceder a financiación”.
- “Las organizaciones pequeñas deben buscar alianzas estratégicas y participar en consorcios para crecer”.
Gemma Lorente Martín:
- “La formación técnica y el conocimiento geopolítico son esenciales para diseñar proyectos viables y sostenibles”.
- “El máster de UNIR ofrece una base sólida y práctica para especializarse en cooperación internacional al desarrollo”.