¿Cómo pueden las escuelas de negocio ajustar su oferta a la creciente necesidad que existe en el mundo profesional y, más en concreto, en el de los directivos, de aprender nuevas cosas durante toda su vida laboral?
La necesidad de formarse de manera permanente a lo largo de toda la vida laboral es, posiblemente, una de las grandes novedades ocurridas en los últimos años para los profesionales de cualquier disciplina. De manera particular, esta necesidad se ha manifestado de un modo muy evidente en el ámbito de la formación de directivos.
Así lo refleja una amplia investigación llevada a cabo el pasado año por AACSB, IEDP y UNICON, tres organizaciones internacionales dedicadas a impulsar el sector de la formación en el mundo de los negocios.
Titulado “Lifelong Learning and University-Based Business Schools”, el estudio muestra las fortalezas y oportunidades que existen en sector de las escuelas de negocio y de la formación de directivos en un escenario de “aprendizaje permanente” que está, además, en constante evolución.
El estudio se basa en una sólida investigación sobre el sector y en una serie de entrevistas en profundidad realizadas a líderes tanto del lado de la oferta como de la demanda de la formación ejecutiva. Esto se concreta en un análisis DAFO (Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades) para todas las partes implicadas y en la formulación de una serie de conclusiones prácticas y recomendaciones dirigidas a escuelas de negocio, empresas y cualquier actor relacionado con la educación de ejecutivos.
Así, el informe ofrece cuatro grandes conclusiones o recomendaciones principales dirigidas a los actores de este sector, que incluye los MBA que ofrecen las universidades:
- Conexiones: el estudio otorga una “importancia vital” a las conexiones “para diseñar e implementar con éxito una estrategia de aprendizaje permanente”. En concreto, se afirma que “la colaboración dentro de las escuelas de negocios, entre proveedores y clientes corporativos, y a través de acuerdos con proveedores externos como socios tecnológicos, será fundamental para satisfacer la gama de nuevas necesidades y la escala de cambio requerida”.
- Estratégico: la investigación señala como un elemento central que “para que se produzca un cambio significativo hacia el aprendizaje permanente, este debe ser considerado un punto estratégico clave de la agenda para los equipos de dirección dentro de las universidades, escuelas de negocio y educación ejecutiva”.
- Guiado por la demanda: según indica este estudio, el futuro de la educación ejecutiva pasa por alejarse de las propuestas del pasado, basadas en el contenido proporcionado por la oferta, para dirigirse, en el futuro, hacia soluciones flexibles basadas en la demanda. Este nuevo escenario “requerirá nuevos niveles de capacidad de respuesta y nuevos mecanismos y foros mediante los cuales las escuelas de negocios y los proveedores de educación ejecutiva puedan participar, interactuar y escuchar atentamente a su mercado y comprender los requisitos cambiantes de sus clientes y ‘usuarios finales’”.
- Variedad: “No existe una estrategia de aprendizaje permanente única para todos”, señalan los autores del informe. “La estrategia de cada escuela y de cada proveedor será distinta”. Esa estrategia dependerá de aspectos como la segmentación del mercado de cada proveedor, de su ubicación geográfica, de su fortaleza de marca, de sus capacidades operativas o de sus ámbitos de especialización.
En la web del estudio están disponibles tres documentos (en formato PDF y en inglés) que se pueden descargar de manera gratuita:
- Un resumen ejecutivo con las lecciones principales
- Un detallado análisis DAFO sobre el sector
- Una hoja de ruta sobre innovación en este ámbito