La innovación educativa es la introducción de mejoras y nuevas prácticas en el proceso de enseñanza para lograr un mejor aprendizaje entre los alumnos.
La forma de enseñar debe adecuarse a los cambios que vive la sociedad, ya sea por los constantes avances tecnológicos o la transformación de la sociedad. En ese sentido, es fundamental incorporar la innovación educativa en las aulas, tomando en consideración los aportes hechos por la neurociencia, la psicología y la tecnología, entre otros.
Los docentes en Colombia necesitan preparar a sus estudiantes para enfrentar el mundo cambiante en el que les tocó vivir. Por este motivo, se debe promover la modernización de las escuelas durante este proceso de transformación.
¿Qué es innovación educativa? La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) define este concepto como “un acto deliberado y planificado de solución de problemas, que apunta a lograr mayor calidad en los aprendizajes de los estudiantes, superando el paradigma tradicional. Implica trascender el conocimiento academicista y pasar del aprendizaje pasivo del estudiante a una concepción donde el aprendizaje es interacción y se construye entre todos”.
Consiste en implementar mejoras en la enseñanza para conseguir que la educación se adapte a las necesidades de los alumnos y estos permanezcan motivados a la hora de aprender. A la hora de introducir cambios, se pueden modificar los métodos de enseñanza, los materiales empleados, los contenidos impartidos o los contextos.
La innovación debe tomar en consideración distintos elementos para conseguir el éxito deseado:
- Los alumnos
- Los docentes
- La tecnología
- El conocimiento
- Los procesos
En Colombia, el Ministerio de Educación Nacional (MEN) se ha mostrado comprometido con la innovación educativa. En ese sentido, ha propuesto distintas políticas y estrategias dirigidas a promover la innovación en el aprendizaje, la transformación digital y las competencias requeridas en el ámbito de la cuarta revolución industrial.
Por medio de la política pública denominada Ecosistema de Innovación Educativa y Transformación Digital, se han diseñado una serie de acciones impulsoras desde cuatro ejes:
- Capacidades para la innovación
- Colombia Aprende
- Aprendizajes para el Futuro
- Transformación Digital
Con esta iniciativa, el MEN busca ofrecer “un escenario expandido para el aprendizaje y permite potenciar, crear o acceder a nuevos currículos, metodologías de enseñanza, sistemas de evaluación, modos de convivencia escolar y, especialmente, nuevas experiencias de aprendizaje que permiten impulsar los cambios que demanda el contexto local y global de hoy”.
Lo anterior es una muestra de la importancia que ha cobrado la innovación en la educación y del porqué los docentes deben aplicarla en el aula.
Tipos de innovación educativa
Existen distintas clases de innovación educativa, las cuales pueden incidir en los procesos de aprendizaje, el conocimiento, las tecnologías educativas y las personas:
Innovación disruptiva
Se refiere a las propuestas que impactan en todo el contexto educativo de forma drástica, modificando de forma permanente el modo en el que se relacionan docentes y alumnos, los medios y el entorno.
Innovación revolucionaria
Consiste en la aplicación de un nuevo paradigma que muestra ser un cambio fundamental en el proceso de enseñanza. Esta aportación no debe haberse aplicado previamente en el ámbito de la educación.
Innovación incremental
Es una modificación que refina la estructura educativa establecida. Consiste en una mejora de una metodología, estrategia, proceso o elemento ya utilizado.
Mejora continua
Son los cambios que afectan parcialmente a alguno de los elementos del proceso de enseñanza –la planificación, el desarrollo, la evaluación, etc.– sin alterarlo de forma relevante.
Introducir la innovación educativa al salón de clases
Para aplicar la innovación educativa en el aula se deben seguir los siguientes pasos:
- Valorar la situación. Hay que analizar en qué situación se encuentra la escuela, con qué medios cuenta y a cuáles tiene acceso y las necesidades del alumnado.
- Establecer objetivos. Es importante señalar cuáles son las metas a alcanzar y los retos que se quieren superar.
- Definir las acciones a emprender. En este punto se determinan los cambios que se aplicarán para mejorar el proceso de enseñanza-aprendizaje, implementar tecnología educativa o introducir nuevos conocimientos.
- Ejecución. Es la etapa en la cual se ejecuta de forma práctica el plan de innovación educativa.
- Revisión de resultados. Es esencial analizar los resultados obtenidos para verificar si se alcanzaron los objetivos y proponer mejoras a las acciones emprendidas.
Para diseñar planes más eficientes y convertirse en un agente de cambio es recomendable estudiar una Maestría en Innovación Educativa como la que oferta UNIR en Colombia. Implementar un nuevo paradigma en el aula será más sencillo si se cuenta con la formación apropiada.
Además, esta maestría permitirá a los maestros ascender en el escalafón docente, al tiempo que colaboran con la transformación de la educación en el país.